Para Tampa el partido contra Washington supunía el final de una sequía de 13 años sin jugar playoff y la victoria supone el final de una racha de 18 años sin ganar un partido de postemporada, justo desde la Superbowl de la temporada de 2002.
El encuentro fue disputado aunque los Buccaneers no fueron por detrás en el marcador en ningún momento. Al inicio, buenas noticias: Mike Evans era de la partida, en una recuperación prodigiosa de su lesión de rodilla, y consiguió 119 yardas.
Comenzamos atacando y, tras un buen drive, nos topamos con uno de nuestros problemas anoche: la falta de definición en la zona roja, por lo que acabamos anotando un Field Goal de Ryan Succop.
Tras un intercambio de posesiones sin reflejo en el marcador, Kevin Minter desviaba un pase del QB de Washington y el balón era recogido por Murphy-Bunting (su acción más meritoria de toda la noche) y Tom Brady remataba el cambio de posesión con un pase a Antonio Brown para touchdown, convirtiéndose en el jugador con mayor edad en lanzar un pase de anotación en playoff. El punto extra era bloqueado por WFT, dejando un 9-0 a favor de Tampa.
En el siguiente Washington anotaba un TD y realizaba un onside kick que era recuperado por Tampa, que no desperdiciaba la estupenda posición de campo, lanzando Brady otro TD, esta vez para Godwin (que estuvo muy dropón toda la noche), fallando los Buccaneers la conversión de dos puntos. La defensa bucanera paraba el ataque del Football Team y en el siguiente turno, tras llegar a zona roja, nos teníamos que conformar con tres puntos. Así, se llegaba al descanso con una ventaja de 18 a 7.
El descanso no le sentó bien al ataque bucanero y en el tercer cuarto Washington anotó 9 puntos sin contestación: un field goal y un TD del Heinicke, que fue un inesperado dolor de cabeza, tras una pérdida de balón de Vaughn. WFT fallaba la conversión de dos y la ventaja de Tampa quedaba reducida a un 18-16.
Afortunadamente, el equipo no notó demasiado los nervios y un nuevo field goal de Succop y un TD de Leonard Fournette, titular tras la lesión de Ronald Jones y que se marcó un gran partido, abrían una brecha de 12 puntos que permitían respirar.
No iban a parar las emociones: Washington anotaba un nuevo TD que solo podía ser contestado con 3 puntos de Succop, de manera que, a falta de menos de tres minutos, WFT estaba en posesión de la pelota, y un TD con conversión de 2 puntos le permitiría forzar la prórroga. Tras conseguir el rival un par de primeros downs fáciles que hacían temer lo peor, emergió la figura de Lavonte David, que lograba un sack que sellaba el patido en la práctica, pues exigía a Washington la conversión de un 4 down y 21, que no logró.
Así pues, el próximo fin de semana, volvemos a tener partido.
Lo mejor: La línea ofensiva y, especialmente, Donovan Smith que protegieron bien a Brady y abrieron huecos a la carrera. Fournette que respondió como RB1. Cameron Brate, que se convirtió en el pase de seguridad. La sangre fría de Succop.
Lo peor: La falta de definición en zona roja, que complicó el partido. La secundaria no estuvo especialmente fina. Hubo poca presión al QB rival. Los equipos especiales volvieron a permitir un bloqueo de patada. La lesión de Alex Cappa.